Por Janera Soerel
Directora Senior, Desarrollo del mercado global de bienes raíces, International WELL Building Institute
La semana pasada, días antes de celebrar el Día Internacional de la Mujer, asistí a un cóctel para las mujeres en los bienes raíces en Manhattan. Al entrar al bar deportivo con aroma a cerveza, me sorprendió el contraste entre este lugar ruidoso y oscuro, y el concepto de un cóctel para las mujeres liderando los bienes raíces. ¿Fue un hombre quien organizó el evento? Muchas otras de las mujeres con quienes platiqué se preguntaban lo mismo al ver que nos servían nachos y bolas de arroz frito mientras intentábamos mantener una conversación a gritos gracias al DJ, en un ambiente con luces poco favorecedoras que emanaban de las pantallas de televisión de gran tamaño mostrando partidos de fútbol.
¿Suena familiar? Estas experiencias incómodas son la norma para muchas mujeres. Las oficinas o espacios de trabajo, especialmente en los que se desempeñan profesiones dominadas por hombres, merecen atención especial y constante.
En muchos casos, el cuerpo masculino es la base del diseño ergonómico. Sin embargo, debemos cambiar esto para el resto de la población. Los espacios donde vivimos, trabajamos, aprendemos y jugamos tienen un impacto enorme en nuestra salud física y mental. Tanto así, que incluso la investigación muestra que estos espacios prosperan cuando las mujeres se sienten bienvenidas. Según McKinsey, las compañías transnacionales con mayor diversidad de género son 21% más rentables.
Las organizaciones pueden jugar un rol más prominente al promover una cultura inclusiva de género y apoyar a las mujeres para que se sientan escuchadas, vistas y bienvenidas. El recién lanzado WELL Equity Rating proporciona una ruta para aprovechar espacios y que estos nos ayuden a cerrar la brecha de equidad en materia de salud que existe en las poblaciones tradicionalmente marginadas, incluidas las mujeres, pero especialmente las mujeres de color.
Las compañías transnacionales con mayor diversidad de género son 21% más rentables.
Hay muchas maneras en que las organizaciones pueden implementar diseños y políticas operacionales inclusivas que mejoren el sentimiento de pertenencia y confort de las mujeres. Un evento diseñado para mujeres que considere que nos gusta conectar con otras mujeres, puede empezar con música a bajo volumen, luz indirecta más suave, aromas agradables y alimentos saludables.
En el ámbito profesional, las empresas de tecnología pueden comenzar a redimir la reputación hostil hacia las mujeres de esta industria al proporcionar salas de maternidad para las madres lactantes y cerrar la desigualdad salarial. Los lugares de trabajo predominantemente masculinos también pueden comenzar por incluir productos de higiene femenina en los baños o al proporcionar estaciones de trabajo ajustables que se adapten a los tamaños de las mujeres para que estas se sientan más incluidas.
Los beneficios y servicios de salud, una de las seis áreas de impacto en el WELL Equity Rating, es otra área en la que una empresa puede ejercer este impacto a las mujeres. El apoyo para el cuidado de los hijos, las licencias por enfermedad y el acceso a la atención a la salud reproductiva pueden beneficiar en demasía a las mujeres trabajando para cierta organización. Dado que las madres que trabajan tienen 1.5 veces más probabilidades que los padres de dedicar tres o más horas adicionales a las tareas diarias del hogar en 2020, hoy en día el agotamiento es un desafío serio para las mujeres que trabajan. El apoyo a la salud mental es de vital importancia para la fuerza laboral femenina.
Las empresas que buscan maximizar los resultados de negocios a través de una fuerza laboral equitativa están brindando programas de apoyo y espacios bien pensados que ayuden a las mujeres a sentirse parte de los lugares de trabajo. Después de la pandemia, 80% de las mujeres clasificó al trabajo remoto como uno de los principales beneficios laborales.
Los horarios de trabajo flexibles, el trabajo remoto o híbrido, sigue siendo un tema importante para las mujeres en la fuerza laboral actual. La implementación de políticas que apoyen a las víctimas de violencia doméstica, así como la implementación de prácticas de mano de obra responsables a lo largo de la cadena de suministro también puede ayudar a proteger la vida de muchas mujeres alrededor del mundo.
A nivel ejecutivo, estamos experimentando la “gran ruptura”, porque la inequidad entre hombres y mujeres está causando que más mujeres en roles de liderazgo renuncien a sus trabajos, según el informe Women in Workplace 2022 de McKinsey. Las mujeres encuestadas han dicho que enfrentan barreras que les dificultan avanzar, dentro de las cuales se encuentran las microagresiones y cuestionamiento de su juicio.
El cambio hacia una cultura equitativa e inclusiva centrada en la salud y el bienestar es clave para retener el liderazgo y el talento de las mujeres. Generalmente, las organizaciones diversas son un tercio más productivas. Hoy en día, la sociedad y los negocios alrededor del mundo están buscando una ruta a seguir que sea tangible y que los ayude a cumplir con su compromiso en la búsqueda de diversidad, equidad e inclusión para crear espacios donde nos sintamos bienvenidos, escuchados y aceptados. Los espacios en los que se libera el poder y el potencial femenino son espacios que prosperan.
