Por Redacción
En un esfuerzo por combatir el cambio climático y promover la eficiencia energética, las empresas participantes del Reto de Edificios Eficientes (REE) de la Ciudad de México están llevando a cabo medidas innovadoras para reducir la emisión de CO2. Estas acciones no solo tienen un impacto positivo en el medio ambiente, sino que también generan ahorros económicos significativos.
Recientemente, representantes del Instituto de Recursos Mundiales México (WRI México) y el gobierno de la Ciudad de México dieron a conocer que desarrollaron un reto como parte del Acelerador de Eficiencia Energética en Edificaciones (BEA) de la iniciativa de Energía Sostenible para todos (SEforALL) de la ONU. Este programa ha sido coordinado a nivel global desde 2015 por WRI.
Desde mayo de 2022, la Ciudad de México ha puesto en marcha el REE a través de la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema), con el respaldo de la Comisión Nacional para el Ahorro de Energía (Conuee), la UNAM y el Laboratorio Nacional de Lawrence Berkeley (LBNL). En la actualidad, se han unido al registro 20 empresas, que cubren una superficie construida de 110 mil 400 metros cuadrados.
Carina Arvizu, directora de Ciudades para México y Colombia en WRI, afirmó en un mensaje que los edificios son responsables del 31 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero. Por esta razón, el REE ha sido reconocido este año como uno de los 29 resultados globales de WRI, enfocados en implementar medidas operativas y tecnológicas de eficiencia energética en empresas y organizaciones. Estas acciones contribuyen al avance hacia la meta de duplicar la tasa de mejora de la eficiencia energética para el año 2023.
“Se estima que más del 75% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero provienen de las ciudades, y la proporción de personas que viven en áreas urbanas sigue aumentando. En nuestra región, que es predominantemente urbana, se proyecta que para 2050, el 89 por ciento de la población latinoamericana residirá en ciudades”, advirtió.
El REE tiene como objetivo implementar medidas rentables en edificios existentes, tanto públicos como privados, en la Ciudad de México. La meta es lograr una reducción del 10 por ciento en el consumo energético de cada edificación inscrita en el transcurso de un año, ya que esto generará beneficios tanto para el Estado como para los residentes.
Además, esta iniciativa permite evitar inversiones adicionales en infraestructura eléctrica, mejorar la calidad de vida de las personas al aumentar el confort térmico y la calidad del aire en los edificios, y mejorar la productividad de quienes trabajan en ellos.
“Invito a todas las empresas y organizaciones a unirse a este desafío para lograr ahorros energéticos, económicos y reducciones de emisiones, fomentando así la acción climática y trabajando hacia la eficiencia y la neutralidad de carbono en empresas y ciudades. Esto permitirá que las personas estén más saludables y sean más productivas”, afirmó.
Según Óscar Vázquez Martínez, director de cambio climático y proyectos sustentables de la Ciudad de México, la energía es la principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero, y sus impactos son significativos tanto a nivel local como nacional.
Israel Jáuregui, titular de la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía (Conuee), aseguró que la eficiencia energética en relación con el medio ambiente se ha vuelto casi obligatoria debido a su importancia.
“Nuestro desafío es aprovechar todas las medidas operativas y tecnológicas para brindar comodidad a las personas. Solicito el apoyo de las instituciones para que la Conuee pueda seguir trabajando en la regulación, promoción y capacitación de las personas”.
Por su parte, Óscar Vázquez Martínez señaló que aún hay mucho potencial para mejorar en términos de eficiencia energética, especialmente considerando el retraso en la adopción de energías renovables.
“Si queremos mejorar el desempeño de las empresas privadas, que generan empleo, y si deseamos que sean competitivas y aprovechen al máximo las oportunidades que ofrecen los acuerdos comerciales, debemos priorizar la eficiencia energética”, propuso.
El evento también contó con la participación del Dr. Michael McNeil, director de la iniciativa energética del Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley (LBNL) en México, Fairuz Loutfi, gerente de Economía Circular y Eficiencia Energética de WRI México, y Naschielli Ayala Vergara, responsable de Proyectos de la SEDEMA. Ayala Vergara destacó que de las 8 empresas inscritas, 5 de ellas ya han logrado que sus edificios cumplan con el Índice de Consumo Energético de la Conuee.
El REE continuará su siguiente fase, buscando implementar medidas de eficiencia energética en edificios que proporcionen beneficios económicos, ambientales y sociales.
Con información de WRI