Por Redacción
La preocupación por el medio ambiente y la búsqueda de la sostenibilidad se han arraigado en nuestra sociedad actual. En este contexto, la construcción sostenible se posiciona como un elemento clave para alcanzar sociedades en armonía con el entorno y mejorar significativamente la calidad de vida de sus habitantes.
Un eje clave en el avance hacia la sostenibilidad es la construcción y en este sector, los materiales empleados son básicos para obtener buenos resultados y conseguir edificios sostenibles donde se reduzcan las emisiones de partículas contaminantes a la atmósfera y sus ocupantes sientan un confort alejado de problemas como el Síndrome del Edificio Enfermo.
Los 8 materiales sostenibles más utilizados en construcción
Existen numerosos materiales sostenibles, pero para la construcción sostenible, los procesos empleados para su obtención y colocación también deben serlo. Vamos a ver algunos de los materiales que más se están empleando en pro de la sostenibilidad. Dichos materiales pueden incorporar tecnología que mejore su funcionamiento y su valor sostenible.
Madera
La madera es uno de los componentes históricamente más empleados. Presenta un impacto ambiental mínimo en su producción y ciclo de vida, asegurándose siempre de que tiene un origen certificado y sostenible.
La madera certificada proviene de bosques gestionados de manera sostenible, lo que asegura que se replanten árboles y se mantengan los ecosistemas forestales. Las certificaciones como FSC y PEFC garantizan prácticas responsables. Sus ventajas incluyen ser un recurso renovable, tener una huella de carbono baja en comparación con materiales como el acero y el hormigón, y proporcionar un excelente aislamiento térmico.
La madera certificada proviene de bosques gestionados de manera sostenible, lo que asegura que se replanten árboles y se mantengan los ecosistemas forestales.
Celulosa
Obtenido a partir de papel reciclado, funciona muy bien como aislante térmico y acústico. Estas fibras de celulosa se suelen obtener, por ejemplo, de periódicos reutilizados y tratados. De esta forma se consiguen excelentes propiedades ignífugas, insecticidas y antifúngicas y se reducen los residuos de papel que de otra manera acabarían en vertederos. De forma complementaria, la obtención de este material es bastante económica.
Corcho
Funciona muy bien como aislante térmico o acústico. Su obtención se realiza directamente de la corteza de los árboles, por lo que no es necesaria la tala de los mismos. De forma común, se dispone en forma de paneles.
Lana de oveja
Destaca por sus propiedades aislantes y, principalmente, por cómo se comporta ante la humedad. Su origen es completamente natural y su obtención consume menos energía en comparación con otros materiales.
Barro cocido
Es un material obtenido a partir de arcilla calentada a elevadas temperaturas al que se le aplican tratamientos naturales que favorecen sus propiedades. Es un material sostenible debido, entre otros aspectos, a su fácil reciclaje y la reutilización de los residuos producidos en su elaboración.
Bambú
Quizá no estamos tan acostumbrados a este material, pero en otras zonas del planeta como las tropicales y la zona asiática es bastante utilizado.
El bambú es un material ecológico y renovable que crece rápidamente, alcanzando su madurez en solo 3-5 años, a diferencia de los árboles que pueden tardar décadas.
El bambú es un material ecológico y renovable que crece rápidamente, alcanzando su madurez en solo 3-5 años, a diferencia de los árboles que pueden tardar décadas. Es extremadamente resistente y flexible, lo que lo hace adecuado para estructuras y acabados. Además, su cultivo mejora la calidad del suelo y la biodiversidad local.
Hormigón reciclado
El hormigón reciclado se produce a partir de restos de demoliciones y otros desechos de construcción, reduciendo así la demanda de nueva materia prima y la generación de residuos. Su uso ayuda a disminuir el impacto ambiental y a gestionar de manera más eficiente los recursos, además de ofrecer buenas propiedades estructurales.
Pinturas naturales
En el caso de las pinturas y acabados, su origen debe ser natural y no deben contener compuestos orgánicos volátiles (COV). El empleo de este tipo de pinturas repercute positivamente en el medio ambiente, puesto que son biodegradables y favorecen la transpiración de los materiales. Además, emiten menos contaminantes al aire, lo que mejora la calidad del aire interior y son más seguras para la salud de los ocupantes de los edificios, especialmente en espacios cerrados.
Las claves de la construcción sostenible
Para terminar este apartado, es importante recalcar algunos aspectos clave para que los materiales sean considerados sostenibles:
Los materiales sostenibles deben repercutir en ahorro de energía, reducción de la contaminación asociada a dichos materiales y la consecuente mejora de la calidad de vida y salud de las personas. A su vez, un material sostenible es aquel que es responsable con el medio ambiente, es decir: (1) que es o puede ser reciclado, (2) que puede ser natural, (3) que no contenga elementos tóxicos y (4) que en su ciclo de vida presente una reducción del uso de los recursos.
Por lo tanto, como claves de un material para la construcción sostenible podríamos establecer:
-Ahorro energético en todo el ciclo de vida del material.
-Reducción del uso de recursos naturales.
-Disminución o eliminación de las emisiones de contaminantes asociadas a los materiales.
-Ser materiales susceptibles de ser reutilizados o reciclados.
El objetivo final es el de conseguir que la construcción sostenible supongan un impacto menor para los ecosistemas y para el medio ambiente y mejoren la calidad de vida y la salud de las personas.
Con información de S&P.