Semillas del Futuro

Categoría: PROYECTOS EN LATAM

En esta categoría el ganador fue Semillas del Futuro, un proyecto presentado por la Alianza de Bioversity International y el Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT). El arquitecto Esteban Martínez, director de Sustentabilidad de Green Loop, la consultora ambiental responsable de la certificación LEED v4 BD+C: NC del edificio, fue quien recibió el premio.

“Es una gran sorpresa, un espaldarazo, como diríamos nosotros en Colombia. Al final nosotros no hicimos este proyecto con el ánimo de ganarnos premios, pero sí significa un paso muy fuerte que ratifica la buena labor venimos haciendo. Desde hace más de 10 años, nos hemos enfocado en ser muy juiciosos y técnicos porque entendemos que la sostenibilidad no es simplemente tener un sistema de certificación y saber documentar, eso creo que lo puede aprender cualquiera simplemente a base de prueba y error, pero realmente la sostenibilidad es tener todo el conocimiento y el apoyo técnico”, asegura Martínez en entrevista con NZC.

Ubicado en el Valle del Cauca, en Colombia, Semillas del Futuro es en realidad un laboratorio de investigación nivel 2 de bioseguridad en donde se resguardan y almacenan decenas de miles de especies de semillas mediante el uso de criogenia. Es gestionado por el CIAT, a su vez parte de una red global de laboratorios del CGIAR, un consorcio de centros de investigación cuya misión es aumentar la seguridad alimentaria, reducir la pobreza rural, mejorar la salud y la nutrición humana, asegurando un manejo sostenible de los recursos naturales.

Semillas del futuro es un coloso sostenible de pies a cabeza. Allí, el CIAT almacena más de 35 mil especies de frijol de todo el mundo, más de 8 mil especies de yucas o mandiocas, y más de 15 mil forrajes de pasto que se usan para alimentar el ganado: “Este es un cliente que en su ADN respira sustentabilidad y por eso buscaban una cosa fuera de lo tradicional. El proceso de certificación arrancó desde el concurso arquitectónico en septiembre del 2014. En los pliegos de la convocatoria pedían dos cosas: que fuera LEED platino, y dos, que fuera Neto Cero. Yo les comenté entonces que el proyecto tenía más pinta de un proyecto regenerativo que de LEED platino, entonces les dije que íbamos a trabajar esas dos líneas: LEED platino, pero también una certificación regenerativa como es Living Building Challenge”, abunda Martínez.

La idea principal, detalla el arquitecto colombiano, era aplicar la biomímesis para replicar “el funcionamiento de un bosque húmedo tropical”. Esto con el propósito de generar distintos microclimas en los laboratorios para optimizar la eficiencia energética y lograr un edificio con muy bajo consumo de agua y energía. El proyecto se concreto en un laboratorio Neto Cero en todo su ciclo de agua y materiales, y Net Zero Ready en energía: “El objetivo era que 40 por ciento de la energía del campus del CIAT fuera de fuentes renovables, por ende, el 60 por ciento viene de fuera. Para hacerse Net Zero lo único que se requiere es conectar la energía renovable, pero la eficiencia del edificio, en su concepto y funcionamiento, está pensado como Net Zero. En conclusión, logramos un laboratorio de seguridad nivel 2 Net Zero Ready en Colombia, Neto Cero en su ciclo cerrado de agua y de materiales. Ahora vamos a ver en qué termina esta historia porque el cliente quiere el Net Zero en energía también, sólo hay que ver en dónde colocamos la planta fotovoltaica para alimentar el banco de germoplasma y de esa manera lograr el triple neto cero”, redondea Martínez.